Me tomó mucho tiempo poder escribir este texto. No por un tema con la complejidad o la extensión del libro, sino por las grandiosas y no tan directas recomendaciones que se desprenden de cada uno de los ensayos que lo conforman. Escritos para desocupados (2013) de la escritora mexicana Vivian Abenshushan es una ventana de reflexión sobre algunos de los principales males de nuestra sociedad moderna: la explotación laboral, la prisa, el rechazo al ocio, el copyright, el burnout y la incapacidad para imaginar los tiempos libres.

Este libro nace de una consigna seductora: “Mate a su jefe: renuncie.” Todo esto, en el marco que ilustra el graffiti de un incrédulo Sr. Burns de Los Simpsons, uno de los íconos de tiranía laboral más populares de nuestros días e inspiración para la “desocupación voluntaria” de la autora. De esta manera, Vivian Abenshushan, quien se ha caracterizado por cultivar un estilo particular en el ensayo literario, levanta una trinchera desde la cual es posible imaginar nuevas posibilidades de la realidad con humor e ironía, pero sobre todo, claridad de que la normatividad laboral es cada día más autómata y menos humana.

Escritos para desocupados es un libro quimérico que contempla una estructura ondulante para no perder el rumbo del lector. Al comenzar la lectura, primero seremos cómplices bautizados como “Los exiliados del tiempo lento”, sección en la que la autora nos comparte sus reflexiones sobre lo que la llevó a rechazar la vida del trabajo convencional, su odio por la aspirina, el origen de los ociosos y hasta la constante relación de amor-odio que podemos sentir por la velocidad. Después conoceremos diversas estrategias para ir a contracorriente del sistema en “Dimisiones” y “Desobedientes”, donde leeremos sobre la interesante labor de los freegans y una breve guía para iniciarnos en el devenir del ocioso como El Gran Lebowski.

Por último, Abenshushan nos compartirá la relación que encuentra entre el ocio, la escritura y los autores, así como la metamorfosis que los escritores han tenido que sufrir en la era moderna al tener que lidiar con los deadlines y el copyright, ambos productos de la era de consumo que han sometido la creatividad a normas de productividad. De igual forma, este libro de ensayos es un recorrido por el pensamiento de autores como Thomas de Quincey, J. G. Ballard, Franz Kafka, Agnès Varda, entre otros, quienes dedicaron parte de su trabajo a la reflexión de alternativas para una vida diferente a la del consumo y la producción masiva.

Más que un enfoque panfletario, Escritos para desocupados de Vivian Abenshushan es un llamado creativo y urgente a replantear, desde una perspectiva personal y después hacia una colectiva, la manera en que nos desarrollamos dentro de un sistema en el que la dignidad humana pareciera estar al servicio de los estándares de producción de las grandes empresas.

Resulta interesante pensar en nuestros hábitos, además del discurso que utilizamos para referirnos a ellos, pues es desde el lenguaje donde podemos darnos cuenta de que el ocio (popularmente llamado “el padre de todos los vicios”) ha sido relegado a un estatus parecido al de un tabú social junto con la mayoría de las disciplinas humanísticas: la música, la pintura, la filosofía y, por supuesto, la literatura. Una pregunta a responder después de esta lectura sería: ¿vivimos para trabajar o trabajamos para vivir? Retruécano sombrío para quienes buscamos en el ocio la manera de resistir al inclemente ritmo de la vida moderna.

Otro aspecto que los lectores apreciarán es la experiencia expandida que ofrece el libro. Fiel a las ideas que plantea en sus ensayos, Abenshushan nos comparte el sitio ​​desokupados.blogspot.com, donde podremos encontrar una gran cantidad de artículos para desocupados que le ayudaron a conformar su libro, además de la versión digital gratuita del mismo. Por supuesto, todo esto con la maquiavélica misión de atraer y crear nuevos lectores desocupados.

A poco más de una década de su publicación, Escritos para desocupados  es un texto que trágicamente se mantiene vigente, pues las condiciones que demarcan los trabajos parecieran no cambiar mucho a pesar de haber atravesado una pandemia mundial y una nueva revolución industrial gracias a la popularización de la inteligencia artificial. Esta es una invitación a leer a Vivian Abenshushan y a conocer las posibilidades creativas que brinda el ensayo literario, género que ha ayudado a ventilar y crear nuevas ideas, siempre apoyadas por el ocio, el origen desinteresado de la escritura.

Escritos para desocupados (2013)
Autora: Vivian Abenshushan
Editora: Gabriela Díaz
Portada: Christian Cañibe
Formación: Karla Martínez
Galeras: Isaura Leonardo
Corrección: Patricia Salinas
Editorial: Surplus
Oaxaca, México

Dorian Huitrón Álvarez

Lector y peatón. «Yo soy aquel». Dicen que soy el chico al que los golondrinos le laceran las axilas.

A veces escribo sobre lo que me gusta, otras entreno Pokémon.