Laura Restrepo: Los divinos o huellas de infanticidio
La psicología femenina es a ratos retorcida: nos han creado la convicción de que todas las cosas malas del mundo se mantienen al acecho, bregando a colársenos por entre las piernas.
Laura Restrepo[1]
La violencia en Colombia es sinónimo de desplazamiento, de hambre, de homicidio, entre otros sucesos que han acompañado al país durante más de sesenta años. Es importante señalar que la violencia en el país sudamericano está asociada a la época de lucha permanente entre los movimientos políticos de los liberales y los conservadores, iniciándose con el asesinato de Jorge Eliecer Gaitán el 9 de abril de 1948. Un acontecimiento que no culmina y que ha enseñado a los colombianos a vivir hasta el día de hoy: la violencia, esa que calcina a diario al país.
Desde esa perspectiva, esa violencia se ha convertido en un eje central de la narrativa contemporánea en Colombia con voces como la de Laura Restrepo, quien desde los 90 nos ha presentado este tema frente a sus habitantes. Es así como Laura se ha convertido en una de las escritoras más leídas del país. Sus novelas son una conexión con Colombia y una crítica a los sistemas socioculturales que permean a la nación.
En ese escenario es imposible dejar de lado el fenómeno de la violencia intrafamiliar que se caracteriza por el modelo del patriarcado, donde el hombre es representado como un sujeto superior a la mujer. Esto conlleva a relaciones de abuso de poder hacia los niños, las niñas, los ancianos y las mujeres.
Actualmente la violencia de género sigue apreciándose en los campos sociales y laborales de Colombia al grado de aumentar el número de feminicidios e infanticidios. Es prudente advertir que Sernam (2012) establece a “la violencia como una práctica orientada, elaborada, aprendida y legitimada de quienes se sienten con más poder que otros/as de controlar e intimidar a quienes se encuentran en un nivel interior”, lo que indica que la violencia es un control social ante el menos favorecido.
No es una fantasía afirmar que en el 2016 un infanticidio conmocionó al país, como fue el caso de la niña Yuliana Samboní. Es necesario recalcar que un infanticidio es una práctica homicida a niñas menores de edad o que carecen de capacidad mental plena. Este tipo de acción se establece la mayoría de veces por una relación afectiva o de cuidado por parte del victimario sobre la menor.
La niña Samboní sólo tenía siete años cuando fue secuestrada, torturada y violada por Rafael Uribe Noguera, quien fue capturado el 6 de diciembre de 2016 e imputado por feminicidio agravado.
Este contexto nos lleva a Los divinos, la ficción en la que Laura Restrepo nos presenta a cinco hombres rodeados de una vida plena y del lenguaje coloquial de esa Colombia que tanto duele, pero que, paradójicamente, tiene tanto por decir. Desde niños, los personajes optan por el nombre de los Tutti-Frutti con una falsa hermandad en medio de la clase privilegiada de Bogotá, enfrentándose a un infanticidio del que intentan salir ilesos.
Además, ponen a prueba su amistad y el verdadero contexto de Rafael Uribe Noguera. Un escenario en que estos hombres tienen relaciones violentas con sus madres, sus novias, sus esposas y las empleadas domésticas o sexuales. Es decir, una violencia que reduce a la mujer a un objeto.
La novela realiza una breve radiografía de la violencia en Colombia y las consecuencias de este fenómeno en la mujer por medio del caso de Yuliana Andrea Samboní. Una niña que descendió de uno de los barrios más humildes de Bogotá (Colombia) y cuyo cuerpo fue hallado en el motor de un jaccuzzi, en una casa ubicada en el barrio Chapinero Alto, sector exclusivo del norte de la capital.
Su cadáver se encontraba untado de aceite como estrategia para borrar las huellas de su atroz crimen. Este evento que ocasionó multitudinarias marchas ante un país acostumbrado a la violencia y el silencio, pero con sed de justicia.
Es así como Laura acude a seis capítulos para hacer la denuncia de este macabro hecho: en los tres primeros capítulos se presentan a Muñeco, Duque y Tarabeo, quienes son los individuos más fuertes del grupo. Asimismo, se presenta un viaje cronológico de sus patrones psicológicos y sociales desde la niñez, pero exclusivamente su accionar con las mujeres.
El cuarto capítulo es la presentación de la víctima, la niña y el aterrador crimen del que fue víctima, para, posteriormente, reflejar con el quinto y el sexto capítulo la desvinculación de Hobbit y Píldora del grupo y el desenlace de lo ocurrido.
Es importante señalar que la autora se demora en el final de la novela con el propósito de hacer una crítica social, demostrando que detrás de todo psicópata hay una sociedad que solapa su comportamiento y que acude a medios como la estratificación olvidando que la justicia es para todos. Un ejemplo de esto lo podemos evidenciar en la clasificación que realiza uno de los personajes sobre las mujeres desde la adolescencia:
En casa de Tarabeo había una sirvienta flaquita que se llamaba Aminca, y hasta yo me retorcía al ver cómo la trataban él y sus hermanos; una vaina medio sádica, la amenazaban con raquetas de tenis cuando no les obedecía en el acto. Sólo que eso tampoco se salía demasiado de los parámetros. P.24.
Finalmente, esta narración no tuvo un príncipe azul o un leñador que lograran salvar a esta Caperucita Roja y escribir un final feliz. El infanticidio y el feminicidio siguen siendo, desafortunadamente, estadísticas de Colombia y el mundo que empobrecen nuestro accionar. La invitación es a leer a Laura Restrepo como un referente de la memoria de Colombia desde la ficción que en ocasiones suele superar la realidad.
Referencias bibliográficas
García, L. (2016). Los divinos. Editorial Alfaguara. Narrativa Hispánica.
Sernam. (2012). Orientaciones técnicas de los centros de la mujer. Ediciones Sernam. Santiago, Chile.
[1] Escritora, novelista, ensayista, profesora y periodista colombiana, autora de La isla de la pasión (1989), Dulce compañía (1995), La novia oscura (1999), La multitud errante (2001), Delirio (2004) y Demasiados héroes (2009).
Licenciada en Humanidades y Lengua Castellana. Especialista en Infancia, Cultura y Desarrollo. Magister en Infancia y Cultura por la Universidad Distrital Francisco José de Caldas. Escritora.